Martes 17. 12:45 se corta la conexión a Internet. Se corta el teléfono.
¿Cómo llamar al 114, reparaciones, sin tono en el teléfono?
¿Señales de humo?
No.
Apenas se me cortó#speedy llamé a mi hermano y le dije que hiciera el reclamo desde su casa. Pero esa no es la cuestión.
Dos días y ni señales del “téRnico”. Y ahora que lo pienso, cuando mi hermano hace el reclamo el martes le dijeron que pasaban por la tarde, pero no aclararon la tarde de qué día, qué mes ni de qué año.
Decía. A dos días de estar incomunicada sin señales, ni de humo, de los de Telefónica, me avivo (si, estaba ofuscada y no pensaba claramente) de que todavía tenía crédito en mi celular y pude usar el teléfono de mi retoñor – cambiándole el chip mamucha - y meterme en Twitter y hacer el reclamo por ahí. (Mi celular mío sólo sirve para llamar y recibir SMS pero tiene un abono con conexión a Internet. No comments. )
A ver @TelefonicaComAr, desde 17/12 sin telefono. Reclamo 2013005000047707, estoy en silla d ruedas y necesito tel urgente!!!!
Ahora, no sé que hubiera sucedido si no hubiera tenido crédito en mi celular…
En fin. 15 minutos antes que se termine el plazo de las 72 hs que tiene Telefónica para arreglar cualquier inconveniente – y yo con la nota para Defensa del Consumidor impresa y lista para llevar el lunes – vino el “téRnico” y en 2 minutos conectó el cable de nuevo (los de la Cooperativa Eléctrica anduvieron cambiando el cableado de los postes de luz del barrio y seguramente cortaron el cable telefónico) y tuve teléfono y conexión a Internet.
Si, en sólo 2 (dos) minutos arreglaron el corte. 72 horas para venir y en menos de 5 (cinco) minutos arreglar un inconveniente que fue reportado en el lapso de una hora desde que me quedé sin tono y sin conexión a Internet.
Ahora espero que los de Telefónica me devuelvan los 3 días que estuve INCOMUNICADA.
Si, porque por más que tenga teléfono celular, la línea del teléfono fijo LA PAGO, no me la regalan, y la uso para conectarme a Internet ya sea para trabajar o para hacer nada, ese es MI problema; lo que hago con el teléfono fijo es MI problema y nadie me regala el abono, lo pago religiosamente TODOS los meses sino los señores de @TelefonicaComAr lo cortan sin pensarlo dos veces.
Pero vamos a verle el lado amable del asunto.
Planché, cociné, ordené, armé el arbolito con mi sobrina de 3 años mientras la cuidaba (el martes), me vi las series que tenía guardadas (pero se me acabaron anoche ), jugué Carta Blanca y al Space Pinball en la compu, y miré tele, un montón... Ah! Y obviamente tuve mi tiempo en el que no hice nada – #ingánica con internet o sin internet - para no perder la costumbre.
Y como cantan los Bee Gees, sobreviví, seguí viva sin Internet. (?)
¡Ajajajaa!
Bueno che, me río para descomprimir y mantener la calma. (?)
En fin. Esto del corte telefónico vino bien para darme cuenta que no soy adicta a Internet. Creo…
Ah! Antes que me olvide, las imágenes estaban en Google.
Esa soy yo cuando se me corta #speedy y me agarra el ataque de ira contra los de @TelefonicaComAr. (Ok, imagen ilustrativa, porque yo estoy en wheelchair/silla de ruedas, juas! )
Nunca entendí la frase "la venganza es un plato que se sirve frío" hasta que me pasó lo de quedarme desde el 6 de enero hasta el 9 de enero SIN #speedy, es decir sin acceso a Internet, porque estaba conectada pero no podía navegar .
Si, así es, no podía entrar a ninguna página, ni al correo, nada. Igual, desde el lunes 9 que volvió por la tarde, va y viene a su antojo la señal, no hay un día que no me quede sin Internet, porque ahora no solo me quedo sin #speedy (acceso), se me apaga el modem solo. Y esto viene del 2008. Un día, tal vez mañana, siempre y cuando no me quede sin #speedy, hago un post con los enlaces a mis crónicas #speedy-anas (?).
A lo que voy es que después de este “impasse” de estar sin#speedy me he dado cuenta que todo tiene su tiempo…
Si bien me pongo del tomate (como loca, furiosa) por pagar un servicio deplorable y totalmente inexistente en gran parte del día, porque cuando menos lo espero me quedo sin #speedy de @TelefonicaComAr, al rato se me pasa la chinche (el enojo, la ira – si, ira iracunda - ¿? ) y pienso que gracias a que estuve sin #speedy, esa “situación” me dio bastante tiempo para hacer notas, muchas notas, para los distintos organismos que “supuestamente” están para hacer valer nuestros derechos como consumidores.
Así que ahora resta sentarme y esperar…
Y menos mal que estoy en wheelchair/silla de ruedas así que eso es “normal” en mí, permanecer sentada (cuack! ) y esperar… Aunque la paciencia, a pesar del accidente, no es mi virtud más desarrollada les comento…¡Aajajaja!
En fin, ya ven que siempre le veo el lado amable a las cosas que me pasan, y aunque me de rabia y quiera matar a alguien (literal y figuradamente), busco la manera de sacarle provecho e invertir mi tiempo en hacer cosas que espero den sus frutos muy pronto…
Porque "la venganza es un plato que se sirve frío".
Antes del accidente, cuando daba clases en la escuela Politécnica 702 de Rawson (era MEP, maestro de enseñanza práctica en el taller de Electricidad del viejo ciclo básico técnico) les decía a mis alumnitos adolescentes rebeldes sin causa:
Yo soy muy buena hasta que dejo de serlo.
Ellos se mataban de la risa, pero sabían que si traspasaban el límite se cumplía mi “dicho”.
Después del accidente dejé de dar clases, pero sigo sosteniendo lo mismo: yo soy muy buena hasta que dejo de serlo.
Ahora, los que se creen que por que estoy en silla de ruedas soy “buena” y media soncita, pues les comunico que no es tan así.
Y hoy viene quejoso el tema , así que el que avisa no traiciona.
Desde que estoy en la cooperadora siendo la presidenta siempre dijeron que yo soy muy buena, pero a veces comprobaron que cuando me provocan dejo de serlo.
Ya tuve que pararle el carro (como decimos acá) a una abuela de uno de los niños que va a la escuela que estaba en la cooperadora (que no se la imaginen como la típica “abuelita” bonachona y dulce, no se equivoquen) porque empezó a tener la costumbre de hablar a mis espaldas y cuando me veía, actuaba como si nada. Obviamente que pasó una vez, dos veces, pero a la tercera vez, cuando empezó a decir cosas que no eran ciertas y a cuestionar lo que se hacía en la Cooperadora, la agarré en el pasillo y aclaramos los tantos.
La mayoría de las personas tienen tan baja su autoestima que no saben meterse en sus asuntos y dejar vivir a los demás, así que se deleitan en chusmear y decir cosas por detrás, y sobre todo, no son lo suficientemente valientes para venir y decir las cosas de frente.
Yo no soy perfecta (ok, si lo soy pero no se lo digan a nadie, juas ) y podré equivocarme, pero a pesar de tener un carácter fuerte sé reconocer mis errores y no se me cae nada si tengo que decir: “lo siento, me equivoqué.”
Ahora. Este año, no sé si porque es el último o porque yo ya estoy muy susceptible, ser la Presidenta de la Cooperadora ha sido bastante difícil, y paso a enumerar algunos ‘porqué’:
Empezando porque los directivos no se comunican entre sí (y si lo hacen lo disimulan muy bien)
Porque hay madres que piensan que pueden hacer y deshacer a su manera algo que tiene un orden
Porque este año me quedé prácticamente sola ya que las mamás que empezaron conmigo en el 2008, muchas se fueron y solo quedamos dos firmes por así decirlo, la tesorera y yo. (Ojo, hay madres colaborando, pero lo que quiero decir es que no las conozco, que son nuevitas).
Muchos padres están desconectados con la escuela, solo mandan los chicos y listo.
Otros se involucran pero tiran para su lado, no trabajan en equipo.
Y otros que se toman atribuciones que no les corresponden por el simple hecho de creerse superiores porque caminan.
Si, leyeron bien. Este año hay varias madres que no les gusta que yo sea la Presidenta. Punto. Parece que al estar en silla de ruedas no califico para ocupar el cargo. Otra no queda. Si no, no sé a que vienen comentarios como:
¿Por qué hay que esperar a Ivana para hacer algo?
What??? ¡Qué gente! No me tienen que esperar a mí, soy la Presidenta y hay un orden. Hay reuniones que hacer para decidir las cosas, no decidir así porque si. Y sorry, pero soy la que preside la comisión directiva, si es que no leí mal el estatuto de la cooperadora donde dice CAPÍTULO VII: DE LOS MIEMBROS DE LA COMISIÓN DIRECTIVA. ARTÍCULO 37º: DEL PRESIDENTE
Otra. Una mamá que hizo unas compras (gracias, eso es colaborar con la cooperadora) y dijo:
“Ya compré todo. ¿Vieron? Yo hago las cosas, no tiene que esperarme ni nada, no como a otras…”
¿?¿?¿?
Y lo más gracioso es que los comentarios me llegan. Si señoras madres que tienen tiempo para chusmear en la escuela pero no para ir a las reuniones de cooperadora que se hacen, oh casualidad ¡en la escuela!, sepan que me llegan sus comentarios.
Se creen que como no puedo ir a la escuela a cada rato porque no tengo quien me lleve (mi hermana tiene cosas para hacer, mi hijo va al colegio) y solo voy a las reuniones, no me voy a enterar que se juntan en los pasillos a “compartir información”, es decir, CHISMOSEAR, y que todo lo que chusmean me llega, tarde o temprano, pero me llega.
Y como sé que “algunas” tienen Facebook y me leen, ayer puse esto en mi muro (recuerden que tienen que tener un perfil en Facebook para leer mi muro, y como sé que muchos no tienen, por eso lo copio acá):
Señoras mamás de la cooperadora que me cuestionan por detrás y no son lo suficientemente valientes para decirme las cosas de frente. Estoy en silla de ruedas, no las voy a correr por el pasillo si me dicen algo que ustedes creen que me va a molestar. Soy lo suficientemente inteligente para contestar con altura - aunque esté sentada - a sus cuestionamientos. Y no, no voy a dar nombres porque sería caer al mismo nivel, pero solo lo comento para que sepan donde encontrarme. Fdo: Yo, Ivana Carina, la Presidenta de la Cooperadora De la Amistad.
Definitivamente esto es inaceptable.
Si tienen algo que decir ya saben donde encontrarme, es más, atrévanse a decirme las cosas cuando estemos reunidos, que para eso también son las reuniones.
Si bien soy de las que no le da mucha importancia al que dirán, soy casi un ser humano y al principio la primera reacción “lógica” es que me moleste, no soy de hielo.
Pero después se me pasa sola la “mala sangre”, o cuando hago catarsis en el blog escribiendo este tipo de posts.
Si, hoy viene quejoso el tema, sobre todo, y repito el título del post, cuando el del servicio técnico (0800) de #speedy @TelefonicaComAr te arruina la tarde y te agarran unas ganas de ir al cubículo ese en el que deben estar atendiendo las llamadas de los clientes QUE PAGAMOS el servicio - porque no nos regalan nada - y en mi caso pasarle con la silla de ruedas por los pies y aplaudirles la cabeza a la altura de las orejas, pero que la cabeza esté entre las manos y con los auriculares puestos, obvio.
Y que no me sigan tratando así que, una de dos:
O mando a estos:
O directamente tomo el asunto en mis manos:
Si, me Río de Janeiro hasta por ahí no más de la situación.
Y ahora te escribo a vos Juan Carlos, operador del servicio técnico de #Speedy del 0800-333-7733 de@TelefonicaComAr, si a vos, que entre las 15:18 – 15:20 atendiste la llamada desde Trelew, y cuando te empecé a decir el problema (que es el mismo problema de conectividad y navegación por el cual llamo cada 15 – 20 días y me quejo por Twitter cuando tengo Internet) de que no tenía speedy en la lap pero si en la PC, me retrucaste (hablaste mientras yo hablaba) lo de las luces del modem; y al decirte que no me empezaras con lo de las luces porque las luces titilaban (todas, te lo había dicho), empezaste a decirme que era una soberbia, que vos hacías 3 años que atendías llamados y “que sabías lo que hacías”, que para que te llamaba si no iba a aceptar lo que me querías decir, y encima el tonito que usabas para dirigirte hacia mi persona era el de “yo sé todo, vos no sabés nada”. Intenté decirte que el problema era la conectividad WiFi, y me saliste con que si yo seguía siendo “soberbia” me ibas a cortar la llamada a lo que te contesté que el soberbio eras vos, que la clienta era yo y que tenías que atenderme bien (ok, convengamos que me hiciste enojar con tu actitud, sabelo), ¿y entonces qué hiciste? ¡¡¡¡ME CORTASTE LA LLAMADA!!!!
¡¡¡ME COR –TAS –TE LA LLAMADA!!!
Desde el momento en que atendiste el llamado, ya desde ahí Juan Carlos, el soberbio, sobrador y mala onda fuiste vos.
Si hace tres años que estás “atendiendo” las llamadas del 0800 y estás haciendo lo mismo, te comento que lo hacés muy mal.
No sos el dueño de la verdad. No sos el dueño del servicio, sos un empleado que te pagan para escuchar a los clientes de Telefónica de Argentina y bancarte lo que te digan, porque vos “representás” a la empresa, así que tenés que proceder correctamente con el cliente que te trata bien, para eso te pagan. Y aclaré: que te tratan bien, porque que los clientes se la agarren con vos cuando el servicio de #speedy funcione para la mona, ok, en eso podés, quizás, tal vez, tener razón en cuanto a que no debería ser así (que se la agarren con vos), porque sos un empleado y solo estás para “solucionar” los problemas, nada más. Y en todo caso, si el cliente es UN IRRESPETUOSO Y TE TRATA MAL, ok, terminar la comunicación amablemente, demostrando que sos más gente que el maltratador.
A veces los clientes nos ponemos densos, pero entendé la situación y ponete en el lugar del que está del otro lado de la línea, eso se llama empatía(y te aconsejo que sigas el enlace de la palabra para que sepas el significado), una “herramienta” importantísima que tenés que aplicar cuando tratás con gente que ya viene re caliente (vulgarmente hablando), con mucha bronca porque paga un servicio que, en mi caso, funciona re mal (cuando funciona)y tengo la visita del técnico de Speedy casi todos los meses, ca-si-to-dos-los-me-ses.Los registros de los reclamos no mienten.
Es más, cada vez que llamo, ¿sabés lo que dicen al técnico?:
“Ahí llamó TU clienta, andá a ver la línea tal”.
Si, pobre José (así se llama el técnico de Speedy), cada vez que ve mi número de teléfono en el reclamo se agarra la cabeza. Y no, no soy yo, ya sabe que tiene que “descubrir” cual es la falla. Ya hemos sacado la conclusión de que mi línea de teléfono debe estar embrujada.
Ah, y Trelew tiene más de 100.000 habitantes, así que imaginate cuántas veces llamo, y siempre, siempre el problema es: o en LA LINEA o en la central; y ya cambiaron cables, pares (¿?), y no sé que cosa que estaba sulfatada (si, no registré que cosa, cuando me empiezan a explicar lo mismo que escucho desde hace 5 años, me “desconecto” y digo si si como a los locos). Hasta llegaron a decirme que era mi computadora, MI COMPUTADORA, que la cuido como si fuera mi hija. Aparte, me cambiaron 4 módems en un año, me hicieron sacar mi router CISCO y me pusieron un router WiFi de Telefónica porque según los del 0800 del servicio técnico, no era “compatible” y por eso se me cortaba speedy. ¿? Aclaro, se sigue cortando speedy y el modem-router es el de Telefónica, o sea.
Así que gracias Juan Carlos, operador del 08003337733 opción 0 del servicio técnico de Speedy de Telefónica de Argentina, por haberme arruinado la tarde cortándome la llamada telefónica (si, porque me la cortaste VOS) que realicé aproximadamente entre las 15:18 – 15:20, hoy, día viernes 14 de octubre de 2011, y sobre todo por haberme tratado como la mona, de mala manera, de manera grosera, demostrando que sos un mal aprendido, porque no creo que tu madre te haya educado de esa forma tan, tan…, ¡ay, tan mal!.
Nota:El que avisa no traiciona. Después que me cortaste Juan Carlos, llamé al 08003337733 opción 2 y me quejé por la pésima atención que recibí de tu parte. Reclamo Nº 442283017 que tomó Gonzalo a las 15:30 hs. aproximadamente.
Ah! Y me quejé por Twitter, obviamente.
Por cierto, cada vez que me quedo sin speedy llamo y anoto los reclamos con día, hora y quién me atendió. Aviso.
Y esta no es la primera vez que me quejo en el blog de mis “dramas” con la conexión de banda ancha (que de ancha tiene el nombre no más) a Internet que me “brinda” (me vende) la compañía de teléfonos que hay en mi zona.
Ok, como nobleza obliga, les cuento que pasó después.
Terminé de cortar con Atención al Cliente después de realizar la queja por el maltrato y volví a llamar al Servicio Técnico porque estaba sin Internet en la laptop. Me atienden y escucho:
- Buenas tardes, mi nombre es Juan, ¿con quién hablo?. – ¿¿Juan?? ¿¿Me están cargando?? pensé…
- Soy la que le cortaste recién la llamada –le contesto sarcásticamente…
- No, yo no fui, yo no corté ninguna llamada –me dice.
- ¿Seguro? –Mientras tanto yo iba manejando la wheelchair con una mano y con la otra tenía el teléfono inalámbrico, intercambiando de mano para llegar al escritorio donde tengo la PC, que es la que si tenía conexión a Internet.
- Si, me llamo Juan Nogués -(creo que ese es el apellido, estaba tan enojada que no escuchaba nada, solo el golpeteo de mi bronca en la cabeza, juas!)– es la primera vez que hablamos. ¿Con quién hablo? –Todo amable él, yo estaba hecha una furia…
- Me llamo Ivana… –y llegué a la compu – ¿estás seguro que no fuiste vos el que me cortaste la llamada recién? – no me convencía del todo, aparte que estaba re enojada.
Juan el amable de ahora en más, me dice que no, que él no es el que me atendió, que figuraba mi llamada a las 15 y piquito, pero que él no era el Juan que me cortó. Aclarado el punto me preguntó cual era el problema, me esperó que me acomodara frente a la compu y que le pidiera a sobri-retoñito que me trajera la laptop para configurar el WiFi; cuando le avisé que estaba lista me pidió que abriera el navegador Internet Explorer - siempre charlando amablemente -, pero yo le dije:
- ¿Ese? UFA, por vos lo hago, pero yo uso el Firefox… - siempre malhumorada… Y bueno, soy leonina.
Entonces amablemente me dijo:
- Entonces hagamos una cosa, abra el navegador que usted esté utilizando y se sienta más cómoda, pedimos el IE porque es el más común… -
Les dije, era Juan el amable…
Abrí el Firefox mientras le comentaba lo que me pasaba, me da una dirección de Internet que conozco de memoria e iba completándola casi en simultáneo mientras me decía los números y yo los repetía sin repetir y sin soplar , y él a la vez se reía porque me la sabía de memoria a la URL.
Me ayuda a configurar la señal del WiFi y cuando terminamos, tenía conexión en la laptop y en la PC de escritorio.
Todo en menos de cinco minutos, ¡¡cinco (5) minutos!!
Durante todo el tiempo Juan el amable estuvo tratándome re bien, con paciencia, guiándome paso a paso, por más que es algo que hago la mayoría de las veces que me quedo sin conexión, y es por eso también íbamos rápido y yo me estaba calmando.
Terminamos, me averiguó un par de cositas que necesitaba saber y me dice:
- ¿Algo más en la que la pueda ayudar, Ivana? -
- No Juan, gracias. Nada más, –a lo que acoté- y la verdad que sos re simpático, porque el que me cortó la llamada, que agradezca que estoy a más de 1500 kms de distancia si no iba y lo buscaba para pasarle con la silla de rueda por encima –
Y me dice riéndose:
- Bueno, yo estoy un poquito más lejos, en San Miguel de Tucumán –y me pidió que me quedara en línea por la encuesta que hacen para evaluar la atención recibida, a lo que le dije que le iba a poner puros 10 y nos despedimos entre risas. (Ok, es de 0 a 9 la puntuación, jajá. )
Si, le puse 9 a todo, obvio , porque así vale la pena hablar con el 0800 de Telefónica, sobre todo con Juan el amable.
Ah! Y también tengo que reconocer la buena onda de los chicos que manejan la página que tiene Telefónica de Argentina en Twitter @TelefonicaComAr, ya que son los que están online “atajando” los problemas de #speedy. Aparte hay que reconocerles que me tienen muuucha paciencia y siempre hacen lo que está a su alcance para solucionarme los problemas cuando me quejo vía Twitter, y eso que a veces los pobres reciben mis “furiosas quejas” y me aguantan hasta que se me pasa la chinche (enojo).
#ListoLoDije.
Y ya sé que no tiene nada que ver pero este video refleja bastante como reaccionaría realmente, cambiando la situación, obviamente, pero sepan que el sentimiento es el mismo, definitivamente. Sobre todo la última frase del video.
)
. 
Y esto viene del 2008. Un día, tal vez mañana, siempre y cuando no me quede sin #speedy, hago un post con los enlaces a mis crónicas #speedy-anas (?). 
, así que el que avisa no traiciona.
, y él a la vez se reía porque me la sabía de memoria a la URL. 
)
, porque así vale la pena hablar con el 0800 de Telefónica, sobre todo con Juan el amable. 